#139. 9 Consejos para trabajar desde casa de forma saludable y productiva
Hoy veremos 9 consejos para trabajar desde casa, que es lo que nos toca en estos días, de forma saludable y productivo.
Con el COVID-19 declarado como pandemia y todos los coles cerrados, la situación no parece que se vaya a solucionar tan pronto como se creía.
Trabajar docentemente desde casa tiene sus ventajas, como la flexibilidad de horarios. Sin embargo, no resulta tarea sencilla y si no se cuidan ciertos aspecto puede llegar a ser perjudicial.
Por ese motivo, es necesario establecer límites y mantener el equilibrio entre la docencia online y el estar conectado y la vida offline y personal.
Surgen también otros desafíos como la falta de contacto con los colegas que puede provocar la sensación de soledad o aislamiento, el pijama puesto todo el día, el constante ruido en las casas (televisión, niños…)… puede provocar dificultad a la hora de mantenerse en “modo de trabajo”.
De algún modo, la labor que desarollo En El Valor de la Educación Física, es muy similar. Es una labor que desarrollo desde la casa. Por ese motivo, me gustaría compartir algunos consejos por si te pueden ser de utilidad en estos días y puedas trabajar eficazmente desde casa.
Vaya por delante, que tendrás que adaptar estos consejos a tu contexto y al ámbito familiar en el que te encuentres.
1. Pon un horario con tus horas de trabajo
Es importante definir cuándo exactamente estás en el trabajo y cuándo no.
Intenta cumplir con tu horario.
Es un ejercicio de autocontrol. Nadie te exigirá nada (a no ser que te pongan una reunión por videoconferencia).
Este horario te ayudará a mantenerte concentrado en tus tareas cuando estés trabajando y a relajarte cuando dejes de hacerlo.
El trabajo desde casa ofrece mucha flexibilidad y es importante mantener el equilibrio en el horario.
Por ejemplo, si trabajas por la tarde-noche, dedícate tiempo para ti por la mañana, o al revés.
¿Qué puedes hacer? Crea tu propio “horario de clase”, con sus franjas horarias.
Compártelo, si es posible, con el resto de familia.
2. Tener un lugar dedicado al trabajo
A todos nos gusta quedarnos en la cama, en el sofá con el portátil, pero no creo que sea la mejor idea.
Es importante crear un espacio de trabajo dedicado. Puede ser un escritorio completo o simplemente la mesa de la cocina.
Da igual.
Lo importante es establecer límites entre el trabajo y el espacio personal.
Esto no quiere decir que no puedas utilizar el portátil en el sofá, puedes hacerlo pero evita no revisar el correo electrónico, mandar tareas, etc.
3. Prepara tu tecnología
Asegúrate de tener todo lo que necesitas: internet rápido, auriculares, cámara web…
Haz las pruebas oportunas.
Considera la tecnología una amiga y aliada.
Sin ella esta situación de ayudar a las familias en estos días sería imposible.
Si tienes problema con alguna aplicación, utiliza otra, pero no termines maldiciendo el wifi, el ordenador, la situación…
Keep Calm 🙂
4. Crea un ritual para comenzar tu día laboral
Cuando se trabaja en el cole, la rutina viene autoimpuesta y es relativamente simple.
Te levantas a tu hora, preparas el desayuno, te vas al trabajo, entras en el cole, saludas a los compañeros y compañeras, firmas y en cuanto suena la sirena, estás listo para impartir tu docencia.
Con el trabajo desde casa, esta rutina es más difícil y un poco más complicado. ¿Cómo sabes que tu jornada laboral ha comenzado?
Es importante seguir una rutina para entrar en “modo trabajo”. Levantarse, una ducha, tomar café y vestirse como si fueras al trabajo. O puedes comenzar el día con un entrenamiento antes de comenzar con tus tareas docentes.
5. Establece reglas para las personas con las que vives
Se piensa en muchas ocasiones que como se trabaja desde casa siempre se tiene que estar listo para cualquier cosa que pueda surgir: tareas domésticas, hablar en cualquier momento, etc.
Hay que compartir con el resto de las personas que viven en la casa las horas de trabajo y pedir, siempre en la medida de lo posible, un poco de privacidad para evitar las continuas distracciones.
Eso sí, asegúrale a las personas que conviven contigo que vais a pasar tiempo juntos una vez que se termine o tengas un ratito de descanso.
6. Tómate tus descansos
Estar sentado en la misma habitación, mirando el monitor… es todo lo contrario que puede ocurrir cuando se está en el cole o instituto. No es una situación a la que se está acostumbrado.
Por eso es importante programar los descansos para mantenerse alejado de las pantallas y cambiar de escenario.
Prepárate un café, o un té, haz ejercicio, juega un ratito con las personas menores de la casa, aprovecha para hacer alguna tarea de la casa…
La idea es que no pases el descanso leyendo noticias sobre coronavirus y mantenga el teléfono fuera de tu alcance.
7. Comunícate y siéntete conectado
En los coles la interacción con las personas y compañeros/as de profesión es algo cotidiano. Situación muy diferente es la que encontramos cuando se trabaja desde casa.
Por este motivo estarás utilizando con mayor asiduidad aplicaciones de mensajería. Es importante consultar la opinión de otros compañeros, así como ofrecerla en el caso que nos la pidan.
Utiliza documentos compartidos donde se puede trabajar de forma síncrona y asíncrona. Crea documentos, presentaciones… y lo que sea en el caso que trabajes de forma conjunta.
Por ejemplo, un equipo docente que trabaje sobre un mismo documento para hacerle llegar a las familias en un solo enlace las recomendaciones para ese día o esa semana.
De ese modo, los docentes se sienten conectados, conocen lo que cada uno va a recomendar, puede hacer comentarios al respecto… y la familia ve unidad y coordinación.
8. Planifícate la semana
Los viernes antes de cerrar la jornada o los domingos por la tarde es un buen momento se sentarse a planificar la próxima semana.
Anota las tareas más importantes. Esto hace que el lunes en cuanto te pongas a trabajar ya sepas por dónde vas a comenzar y cuáles son las tareas prioritarias.
Puedes anotarte un recordatorio en el móvil para que este hábito no se te pase.
9. No olvides de dejar de trabajar
¿Qué?
¡Si!
Ya he comentado la importancia de los límites y mantener el equilibrio entre la vida laboral y personal. Este equilibrio es clave en estos días de confinamiento en casa.
Crea un ritual que indique cuándo ha terminado tu jornada laboral.
Sal de todas las aplicaciones relacionadas con el trabajo, haz un poco de ejercicio, juega a un juego de mesa con el resto de personas de la casa…
Pon una hora para comenzar con esta rutina de “desconexión”.
Resumen y conclusión
Nos estamos enfrentando a una nueva situación laboral en la que la responsabilidad personal juega un papel sumamente importante.
Por ese motivo, marcar horarios, rutinas de comienzo de trabajo, de finalizar el trabajo, de establecer periodos de descanso, de jugar en familia, etc. es sumamente importante para llevar a cabo de la mejor manera posible la labor profesional que nos toca en estos días sin dejar a un lado el aspecto personal.
Y si quieres incluir en tus rutinas de trabajo la formación continua, por aquí te dejo los cursos de educación física para que les puedas echar un vistazo y dedicarle 5-10 minutitos al día.
Arjona dice
Sencillamente genial. Como (casi) siempre. Gracias nuevamente por todo lo que aportas en general y al «mundo» de la EF en particular. Un lujo tenerte siempre ahí y poderte leer y seguir. Mil gracias.
Francisco Javier Vázquez Ramos dice
Hola Arjona,
Muchas gracias por el comentario y el feedback.
Así da gusto 🙂
Un abrazo y a cuidarse mucho!
Irene dice
Kisco me encantaron todos los consejos que dejaste por aquí.
Me encanta leerte…sigue así,te mando un abrazo a distancia.
Francisco Javier Vázquez Ramos dice
Hola Irene,
Muchas gracias por el comentario y el feedback 🙂
Un abrazo y a cuidarse mucho!