#441. El problema (gordo) del docente comprometido
Hay una paradoja que llevo pensando tiempo y que no veo a nadie hablando de ella.
Y es que, muchas veces, cuanto más comprometido estás con tu alumnado, más difícil se hace que ellos crezcan por sí solos.
Ya sé que suena un poco raro. Incluso injusto.
Pero estar tan comprometido con tus estudiantes puede generar un problema. Para ti. Para ellos.
Y no por falta de ganas. Ni por falta de vocación.
Al contrario.
Surge, precisamente, porque te implicas demasiado.
Veamos de qué se trata exactamente y cómo resolverlo por si a ti te pasa.
1. La trampa invisible del compromiso docente
Normalmente la persona que tiene un alto compromiso docente suele pecar de implicarse demasiado.
De querer llevarlo todo por delante.
De planificar, de preparar materiales, de organizarlos en el espacio…
Es decir, es una persona que suele poner toda la energía del mundo en sus clases y, por tanto, quiere que todo salga bien y si tiene que ir detrás de los alumnos, va detrás de ellos, y corrige, y apoya, y mide y reajusta.
Sin embargo, por más que tira del carro, a veces, el carro no se mueve.
A pesar de cargar con todo, de poner toda su energía en que todo salga bien, no siempre ve la recompensa que espera.
¿Por qué?
Habrá muchas razones. Pero una es que las personas que continuamente quieren hacerlo todo en sus clases no ejercen un liderazgo pedagógico.
Más bien cargan con todo y terminan agotados.
Puedes llamarlo implicación, entrega, compromiso…
Pero en realidad, en muchas ocasiones, es una forma disfrazada de control.
Queremos que todo funcione tan bien, que terminamos asumiendo todo.
Y claro, el alumnado, se acostumbra a que todo se lo des hecho.
Y eso no es lo peor.
Lo peor es que el propio alumnado se siente ninguneado, no siente que forma parte del equipo, se siente, en muchas ocasiones, un mandao.
Y casi sin darnos cuenta, nos convertimos en dictadores pedagógicos con buena intención.
2. ¿Y si lo que necesitan no es más de ti?
Entonces, te lanzo una pregunta:
¿Y si el problema no es que no das suficiente, sino que das demasiado?
¿Y si lo que tus alumnos necesitan no es más de ti… sino más espacio para participar, para responsabilizarse, para descubrirse a ellos mismos?
A veces confundimos enseñar con intervenir constantemente.
Y son cosas (muy) diferentes.
Enseñar implica saber retirarse.
Intervenir implica no retirarse nunca.
Y si alguien no crea los espacios necesarios para que el estudiante pueda responsabilizarse de sus acciones.
Dejar que el error ocurra.
Que el alumnado tome sus propias decisiones.
Que se equivoque.
Y gracias a esa implicación, gracias a ese hacer por parte del alumnado, es que se produce el aprendizaje.
Un niño pequeño no aprendería a andar si no le dejamos el espacio para que tropiece, para que dé tumbos… sería imposible.
Y es importante tener en cuenta que como docentes nuestra misión no es que todo salga perfecto. Nuestra misión es hacer que tus estudiantes crezcan. Y para crecer hay que dejar libertad. Y para dejar libertad como docentes tenemos que liderar. Inspirar.
Yo mismo he pecado de querer que todo salga perfecto. Pero eso es un error. Un error porque dejas a tu alumnado en la cuneta y terminan sintiéndose unos «sí, wuana».
Y eso, lógicamente, no es bueno para el aprendizaje, ni para el clima del aula, ni para su motivación, ni para nada.
Por tanto, a veces queriendo hacer las cosas lo mejor posible nos estamos pegando un tiro al pie.
No digo que esto te pase a ti, pero sí es bueno hacer una autoevaluación para ver si te está pasando.
3. Evento el 30 de junio a la 19:00
Y sobre esto va el evento que voy a realizar mañana lunes día 30 de junio de 2025.
No sé cuándo estarás escuchando esto.
Pero.
El lunes 30 de junio, a las 19:00h, voy a hacer un evento online gratuito donde vamos a profundizar justo en esto.
Se llama:
“Hazlos libres y libérate: 3 estrategias prácticas para el día a día.”
Y no es solo un título atractivo (al menos a mi me lo parece)
Es un enfoque educativo muy concreto:
Dejar de empujar todo el rato y empezar a diseñar clases que funcionen aunque tú no estés encima.
Para eso, voy a compartirte 3 estrategias educativas concretas, probadas, y transformadoras.
No son teoría.
No son ideas vagas.
Son estrategias que puedes aplicar directamente en tus clases, tus programaciones, en tus unidades, en tus oposiciones si quieres.
Y no, no te voy a soltar una charla motivacional sin sustancia.
Vas a salir de ahí con herramientas reales.
Probadas y que funcionan.
Y lo sé porque las he puesto en práctica todas. Y no solo yo, sino también un montón de socios de la ComunidEF.
Porque lo que te voy a contar mañana no son 3 contenido random para luego ofrecerte que te hagas socio de la ComunidEF.
No.
Son 3 contenidos de muy alto valor.
3 estrategias probadas.
Que funcionan.
Y con tres historias que, probablemente, te vayan a inspirar.
Estrategias educativas de altos vuelos e historias inspiradoras.
Un gran combo.
Justo después del evento abriré las puertas de la ComunidEF a nuevos socios.
Y si estás interesado podrás hacerte socio.
Pero vamos, que no es obligatorio, lógicamente.
Yo que tú me pasaría por el evento aunque no tuvieras intención de hacerte socio de la ComunidEF.
4. ¿Tienes que apuntarte?
¿Y sabes qué es lo mejor?
Que no tienes que apuntarte a nada.
Si estás en la newsletter, ya estás dentro.
El mismo día 30, mañana, te llegará un email con el enlace.
Y si quieres, te conectas. Y si no, pues no.
Así de sencillo.
Ahora bien, el enlace no lo pondré en ningún otro lado. Es exclusivo para las personas que están en la newsletter y tú puedes apuntarte en https://elvalordelaeducacionfisica.com
Si medio te sientes identificado con esto que hemos visto, es probable que te interese.
Y si ya estás en esta línea de querer liderar, las estrategias que vamos a ver también te van a ser muy interesantes.
Vamos a ver estrategias para hacer cosas diferentes.
5. Al final del evento te presentaré la ComunidEF
La ComunidEF la conforman 4 másteres de un nivel altísimo (y no es una forma de hablar).
Con profesores que están impartiendo másteres por toda España.
Pero con una diferencia.
En la ComunidEF, estamos entre amigos y no hay un título oficial, por lo tanto no hay obligatoriedad de dar contenido para rellenar créditos, ni contenidos tipo «historia y evolución de…». Ni tampoco clasificaciones y clasificaciones que terminan siendo infumables.
Dentro de la ComunidEF encontrarás solo estrategias prácticas.
Solo planteamientos útiles.
Aquí no se trata de sacarse un título, y cobrarte por él 2.495€.
No.
Esto va dirigido a gente que pisa patio (o aspira a pisarlo).
Y tú tienes acceso a TODO.
A los 4 másteres que hay dentro:
- Máster en metodologías activas y modelos pedagógicos.
- Máster en atención a la diversidad.
- Máster en planificación y elementos curriculares.
- Máster en saberes (contenidos) innovadores en EF.
Como te digo después del evento abriré las puertas a nuevos socios y si te interesa puedes hacerte socio.
Las puertas estarán abiertas durante unos días de julio.
6. A modo de conclusión
Hay una verdad incómoda que a veces nos cuesta aceptar como docentes: en muchas ocasiones, cuanto más damos, menos dejamos crecer.
Y no es por ego. Ni por protagonismo. Es porque queremos que todo salga bien. Porque nos importa lo que hacemos.
Porque sentimos que si no lo hacemos nosotros, nadie lo hará.
Pero precisamente por eso… corremos el riesgo de convertirnos en el mayor obstáculo para el crecimiento de nuestros alumnos.
El compromiso sin medida puede acabar siendo una forma elegante de control.
Y la ayuda, si no permite que el otro se equivoque, se descubra y decida… no es ayuda. Es dependencia.
Por eso, está bien pararse de vez en cuando y preguntarse:
¿Estoy liderando… o estoy controlando?
Y recuerda:
Cuando haces a tus estudiantes libres, no solo estás dejando una tremenda huella en ellos, sino que tú también te liberas de lo menuito del día a día y puedes centrarte en esas cosas más importantes a nivel educativo.
Pasa un gran día.
Kisco.
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