#418. Dos tipos de docentes, ¿en cuál te ubicas tú?
Ahora que estamos empezando el año conviene recordar una cosa importante.
Es importante para la vida y, por supuesto, para la docencia.
Se trata de cómo ves el futuro.
Hay gente que lo mira desde la atalaya del miedo.
Y gente que lo mira desde la esperanza.
Ojo, siempre hay de las dos, pero me refiero a la que predomina.
Ya me entiendes. No somos robots sin sentimientos para no albergar algún tipo de miedo. Y con la esperanza ocurre algo parecido, que siempre albergamos en nuestro interior aunque sea un rescoldo.
Lo que te decía.
Si partimos de esa premisa, están los que son del barrio del «y si…»
«Y si salgo a la calle y me pilla un coche».
«Y si vamos a esa fiesta y es un coñazo».
«Y si vamos a hacer ese planteamiento y sale todo mal».
«Y si…»
Estos son los del miedo.
Es casi seguro que conoces a gente así.
Todos conocemos gente así. Lo mismo tú eres uno de ellos. Y no pasa nada. Eso ni es malo ni bueno. Simplemente es. Lo importante es saber que estás en ese barrio para poder visitar otros lugares que quizás te satisfagan más.
Porque está el otro barrio.
El de las personas que miran al futuro con esperanza.
Y con esperanza no significa que miren y vean unicornios rosas voladores y todo con brilli brilli, no.
Con esperanza significa que saben que puede haber dificultades y a pesar de eso optan por avanzar.
Por hacer cosas.
Sabiendo que el error está ahí y que no pasa nada. Que solo es muestra de que se están haciendo cosas nuevas que te ayudan a avanzar.
«Y si vamos a esa fiesta y nos lo pasamos de puta madre».
«Y si vamos a hacer este planteamiento y resulta que sale genial».
«Y si le proponemos esto a nuestros estudiantes y les gusta».
Es una cuestión de mirada, de perspectiva.
No hay más.
Y como te decía, es importante que nos conozcamos para saber que hacer cosas nuevas. Que salir de la monotonía, es posible que conlleve algún riesgo, pero que tampoco pasa nada. Nadie es perfecto. Y en la profesión docente hay que mantener ese gusanillo de estar ilusionado.
Y eso se consigue visitando más el barrio de la esperanza que el del miedo. Es así. El miedo paraliza, hace que no hagas nada y cuando quieras echar la mirada atrás… ¿qué?
Bueno.
En estos primeros compases de 2025, quería compartir contigo esto, porque realmente la educación física está llena de cosas que hacer, de cosas que poder practicar, de estrategias que explorar…
Sinceramente, creo que más que nunca, la educación física tiene una importancia brutal en el sistema educativo.
Es una pieza clave. Y esa pieza necesita de profesionales, de personas, que estén ilusionados. Y todos sabemos lo difícil y complejo que está la educación en estos momentos, pero si nos quedamos dando vueltas solo sobre los problemas estaremos estancándonos. Los problemas existen, los miedos existen y, aún así, hay que mirar al futuro con esperanza. Al menos eso es lo que pienso.
Pero eso mismo pasa en la educación y en la vida.
Bueno, nos vemos por la newsletter mañana (sea cuando sea que estés escuchando este podcast).
Un fuerte abrazo.
Kisco.
Estratega educativo.
Deja una respuesta